En este artículo le detallaremos algunos síntomas de estrés que usted puedes presentar, y así es como los puedes identificar.

Continuación:

Quizás no te hayas prestado mucha atención últimamente como para percatarte de que estás estresado. Escucha a tu cuerpo y procura hacerle caso cuando te diga que está harto del ritmo al que lo sometes.

En cada persona se manifiesta el estrés de una manera. Hay a quienes le da por comer en exceso y a otros se les va el apetito; unos sufren arrebatos consumistas y otros se ponen de los nervios sólo porque se agoten las pilas del mando a distancia de la tele…

Aun así hay una serie de síntomas que suelen manifestarse con una frecuencia más elevada en la mayoría de las personas afectadas por este mal moderno. Veamos algunos…

  • Dolores de cabeza. Hay algunos que se deben exclusivamente al estrés. Suelen ser recurrentes y acostumbran a venir acompañados de tensión muscular en la frente o en la base del cuello.
  • Frecuentes gripes y resfriados. El estrés debilita el sistema inmunitario.
  • Problemas de sueño. Sobre todo, falta sueño reparador, al ocuparse el estrés de que durmamos sobre una almohada rellena de preocupaciones.
  • Ansiedad. Este mecanismo de defensa es útil ante una situación de peligro, pero vivir todo el tiempo con esta sensación es debastador. El estrés da lugar a que no puedas desprenderte de ella.
  • Pensamiento desordenado. Si no puedes pensar de forma clara, puede ser porque el bailoteo de hormonas que produce el estrés tenga la culpa.
  • Sentimiento de frustración. El querer abarcar por fuerza más de lo que se puede, produce irritabilidad y frustración cuando no se logran los resultados esperados.
  • Disminución de la líbido. No tienes ganas de tener relaciones sexuales. El estrés las aminora o se las carga del todo.

¿Te animas a apuntar más síntomas para la lista? Cuando antes asumamos que estamos estresados, antes podremos hacerles frente a todos los males que trae consigo el estrés.

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